Hubo un poeta en España,

su historia es bien conocida,

voló entre vientos del pueblo

y transmitió su alegría.

Pastor en su juventud,

fue lector empedernido,

alegre e iluminado

por lo mucho que ha leído.

Libre siempre, como un pájaro,

aun estando encarcelado.

Fue muerto por sus ideas

enfermo y desamparado.

Pero la muerte no pudo

jamás del pueblo arrancarlo,

sigue siempre con nosotros.

El pueblo no va a olvidarlo.

¡Ay! ¡qué bonito sería!

Que aquí la memoria histórica

hiciera justicia un día

con tanta persona heroica.

Autor: Pedro Jesús Cortés Zafra.

La impudicia de proclamas

es la esencia de los miedos

y el cruel insomnio del hambre

hace de España un infierno,

que llaga hasta al propio cielo,

velando ojos de un alba

donde el aire es fugitivo

de estas almas desterradas.

Un océano de olvido

entre cantos de puñales

de luctuosa traición

ya pueblan nuestros paisajes.

La juventud decidida

pone dedos de distancia

arrojada por el mundo

con pobreza y con nostalgia.

Y en las desnudas mortajas

de esta triste democracia

con cadavérica peste

la corrupción hace gracias.

Estirpe que tumba sueños

donde naufraga esperanzas

poniendo un hosco silencio

con ternuras desterradas.

Cualquier repudio nos toca

que las hilachas de honor

que les salen por la boca

aullidos de sangre son.

Todo a golpe de ambiciones

quieren llevar el timón

con implacables tormentos

al pobre trabajador.

Borracheras de soberbia

de antiguas luces altivas

nos van cubriendo de harapos

y gobiernan nuestras vidas.

Autor: Pedro Jesús Cortés Zafra.

Sublimarás tu espíritu

educarás tu cuerpo

crecerás como humano

con ideales ciertos.

Buscarás los caminos

un árbol plantarás,

leerás nuevos libros

y llegarás a amar.

Pero llegará el día

en que el cuerpo decrezca

y viejos ideales

sean esperanza incierta.

y el único camino

que estará frente a ti

será la tumba cierta.

No olvides construir

algo de savia nueva

con todos tus triunfos,

que si Amor, tú, no dejas

solo serás... ¡difunto!.

Autor: Pedro Jesús Cortés Zafra.

Aun antes y aun después,

de mi muerte segura,

yo seguiré muriendo;

viviendo mis lagunas.

Yo sueño con pasados

y recuerdo futuros.

Futuros enmendados,

pasados menos duros.

Mis anónimos versos

pasarán de puntilla

sobre camino incierto

como viejas letrillas.

El mundo sin conciencia

no lo podré cambiar,

pero con mi experiencia

quisiera yo avisar

que si nada quedara,

de mensajes de amor,

mal camino llevamos

de horror y destrucción.

Autor: Pedro Jesús Cortés Zafra.

La solución es sencilla

apadrine usted un negrito

y déjese de rencillas.

O apadrine un borriquito.

O una oveja, o cinco sillas...

igual que se hacía antes.

Para lavar las conciencias,

apadrine un estudiante.

¿Qué el Estado pa qué sirve?

Para servirnos de él

Dicen todos los ministros,

¡¡¡Para servirnos de él!!!

Si tuviéramos el arte

de no consentir ya más.

que pobres con uniformes

puedan ellos aporrear

a otros pobres con hambre

solo por beneficiar

a ricos sin uniforme

y sin hambres además.

Si esto llega a suceder

habremos adelantado

la clave para salir

del problema que han creado

para dar esclavitud

y al dejarnos sin trabajo

haya que rogar currelo

por dos céntimos de chavos.

Autor: Pedro Jesús Cortés Zafra.