Es sórdido escenario:
vida de hombres de tornado,
de mujeres de peltre,...
agradeciendo. al mundo viciado,
la “belleza” del gramo de coca
que con sangre y salud se han logrado.
O el adolescente que, en ginebra,
llega a estar de los problemas enajenado.
En el filo de los dioses se creen,
vendiendo sus reinos por mil pelas.
Sus cuerpos, sin ser dueños
de hermosuras ni de sueños,
van ahogando, en la droga, sus mil penas.
Autor Pedro Jesús Cortés Zafra.