Hoy me encuentro en la ventana,
mirando a un futuro incierto
en una noche estrellada.
Me encuentro un poco raro,
Aquí hace falta entereza.
yo no sé cómo explicarlo.
No sé si es alegría o tristeza,
No encuentro el motivo ni la razón.
Creo que estoy triste
porque miro una foto de mis hijas
y se me cae una lágrima.
Estoy seguro, estoy triste.
Es como tener clavada
dos espinas en el alma.
Si tuviera alas volaría
sin mirar hacia atrás.
Dejando el pasado presente
y el presente pasado.
Siento que estoy en un mundo
al que no pertenezco.
Donde me encuentro reinan:
la desigualdad,
la discriminación,
la falta de oportunidad.
Por cometer un error
aquí me veo encerrado
Hoy me llevan para allá,
mañana para otro lado.
No se pueden romper
estas cadenas
Están hechas de acero.
Son irrompibles.
Seguiré insistiendo en romperlas...
siempre...siempre...
Hoy me encuentro triste,
por una mala noticia,
algo que le ocurrió a un amigo.
Sentí que mi corazón se rompía.
Nunca me pasó algo así.
Las fuerzas de mi espíritu
no me van a dejar atrapado
en este mundo cruel
como el que me tocó vivir
inmovilizado, dominado...
por aquellos que devoran nuestras vidas.
Sin pensar que todavía pensamos.
Sentimos y somos iguales a ellos.
De carne y huesos.
Y tenemos la esperanza de aspirar
a un futuro mejor...
a tener una familia,
una capacitación laboral,
a ser alguien en la vida.
Como persona y residente,
he podido salir de todo lo malo,
esta es la realidad.
Me duele mucho
que después de haber pagado
nos sigan juzgando.
Cuando buscamos trabajo,
siempre sale que estuvimos
de la libertad privados.
El sistema está hecho así.
Para que la sociedad te discrimine
y vuelvas a la cajita
de donde te soltaron.
Donde encontrarás el odio,
la ira, el dolor...
¿Qué hacer cuando esta sociedad
te oprime?
¿Qué hacer cuando no te da
oportunidades?
La igualdad existe
para aquellos que tienen dinero.
Yo soy pobre y estoy aquí.
Donde ustedes saben...
Dentro de esta gran caja...
donde casi no puedo respirar.
Hoy he comprendido que la droga
fue una destrucción para mi vida.
Fueron muy duros
los primeros días en este lugar.
Desesperado de tristeza,
de rabia y de dolor,
he dejado muchas lágrimas,
he sanado mis dolores,
tendí mis manos y me agarré fuerte
de un futuro incierto.
Abrí las puertas de mi corazón
para recuperarme
de la terrible adicción
a las drogas,
Por un día entrar en ellas
he perdido casi todo,
amigos, sitios, familia...
Algunos compañeros fallecieron
por causa de esta adicción.
Aunque también algunos hemos tenido
la oportunidad de estar
en el lugar donde me hicieron pensar,
rehabilitarme para poder
dejar las oscuridades
y el infierno que nos iba destruyendo
poco a poco.
Muchos como yo
hemos podido a través del tiempo,
recuperar nuestros valores,
nuestros sueños...
volvimos a soñar con un futuro
para una vida mejor.
Volvimos a recuperar el diálogo
con nuestras familias.
Volvimos a afrontar
las consecuencias que la vida
nos pone por delante
para superar las piedras del tropiezo.
Empezar a quererse uno mismo
a soñar, a forjar una familia,
lejos de toda esa oscuridad.
A la que te lleva la terrible
adicción a las drogas.
Para eso, nada mejor
que seguir sonriendo
y apostando al progreso
esto alegra mi alma y mi espíritu.
A veces, inconscientemente
necesitamos un empujoncito
por diversas situaciones
que se nos presentan en el día a día
Poner una sonrisa contagiosa,
y el deseo de ser
de hacer feliz a quienes te rodean.
Si fuera necesario
ayuda profesional
que es muy difícil salir de este infierno
Sin buena predisposición,
sin anhelos,
sin deseos de cambiar
nunca la vamos a dejar
pero recuerda
todo está en la mente
y en el corazón.