Deslizo en tí mi cuerpo,...
delirio de gemidos,
erizados de fiebres
de ternuras zurcidos.
Enciendo torbellinos,
en esta noche fría.
Memoria de aromas
de la abnegación mía.
Trepo por tus grietas
a tus almenas de arcilla.
Camino por tus muslos
de carnes amarillas,
devoto de tus huecos,
en perfil de ceniza.
Me alumbran tus faroles,
que alejan mi agonía.
Rotundidad de cuerpos
en olas de alegría.